Ayer nos marchamos a Bilbao desde las 08:00 y llegamos a las 10:00 pero en el trayecto pasaron cosas, como vaciles, matemáticas, gente durmiendo y un buen ambiente.
A mí no me gustó cuando
alguien empezó a preguntar:” ¿Cuántas camisetas, bolígrafos y bloc de notas vais
a vender cada uno, del encargo que habeis hecho a Kukuxumusu?” Y yo pense “Mates
noooo, jo” porque a mí no me gustan nada. A la pregunta yo respondí 20
camisetas, 20 bloc de notas y 20 bolígrafos, al tuntún porque no sabía. En
cuanto oigo hablar de números, me bloqueo.
Cuando de repente vi que
estábamos parados, pensé que ya habíamos llegado, pero no, nos había parado la
policía.
Al llegar a Bilbao, en el
trayecto a pie para llegar al museo Guggenheim,
vi qué pasa cuando no te fijas en los bordillos si vas con la silla de ruedas y
por poco Fermín, mi compañero de clase, se cae hacía adelante con ella.
Mónica, que fué nuestra guía
en el museo, nos explicó el por qué se le puso ese nombre y nos dijo las
diferencias que tiene con otros museos como por ejemplo, no hay un recorrido
sino que puedes empezar desde donde quieras porque las cosas están por todo y
no en un lugar fijo.
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En una parte del museo |
Lo que me gustó fue la
tarta gigante y los diferentes laberintos. Al observar que existe este otro
tipo de arte, se me ocurrió hacer un volante gigante o hacer una exposición
sobre el tacto como por ejemplo, la harina, la arena y el pan rayado.
En el laberinto, solamente
nos metimos en uno porque había muchos y distintos pero, cuando me metí, en un
momento del recorrido me dio la sensación de que me iba a dar con la cabeza por
la forma de la pared y que acabaría en un lugar pequeño por ir metiendo cada
vez más por dentro pero al final era sólo un circulo y acababas en un lugar
grande.
A continuación vimos como
unos carteles con texto en vertical y me parecía como si estuvieramos metidos
en un ascensor y subiendo. También que entre esos carteles hubiera cristal pero
no porque se podía pasar.
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Aquí dentro la letra de los carteles eran azules y no rojas como por fuera |
Luego, como estaba
pensando en los carteles eléctricos, entonces me choqué con mi compañero Jonantes de ir al ascensor a seguir viendo más cosas. Yo no me hice mucho daño(Jon
sí) pero eso es lo que tiene si no estás en donde debes.
Después de hacernos la
foto con el perro de flores, antes de ir a comer, me fijé en el carril del
tranvía y menos mal que le levantaron las ruedas delanteras de la silla de Fermín,
para que no se atascasen.
En la comida me tocó
componer la ensalada y yo como no tengo ni idea, no me atrevía a hacerlo por si
salía mal, pero Diana me respondió: “No pasa nada y así se aprende” Entonces me
decía el orden de las cosas y lo que era, mientras componía aunque eché un chorretón
de aceite… y mi profesora Elena se rió.
Más tarde, nos visitó una
amiga de Diana y que nos sigue en twitter y como estaban hablando entre ellos,
entonces seguí comiendo el filete y Elena se puso: “Dale que te pego con el
filete y podéis levantaros para saludar” Yo no quise levantarme al principio,
porque no les quise interrumpir en sus conversaciones y porque no te puedes
levantar hasta que no hayas acabado de comer.
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En el postre |
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Con Arancha |
Luego, nos marchamos a “ Lataller” y era como viajar a la edad media porque eran aparatos de grabado de
esa época y de los chinos y me acordaba porque tengo un libro sobre historia.
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En el siglo XV (15) |
No me apañaba muy bien con
el metal y con la luz porque veía un poco oscuro y el dibujar con el punzón,
tampoco me resultó sencillo porque no se podía dibujar todo seguido como el lápiz
o las pinturas.
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A veces me pasaba esto |
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Roberto, Asun y yo |
Maite nos explicó sobre cómo
grabar imágenes y pasar a un papel y Mikel lo que quiso transmitir con su arte,
pero me resultó complicado entenderle.
En el autobús de la
vuelta, Fermín y yo hablamos bastante rato sobre la accesibilidad porque nos
gusta mucho ese tema y la nueva idea que tuve pero que no puedo contar, como
otras que tengo porque igual la gente me las quita.
Otro de los temas, son las
fiestas de sanfermin y los ensayos de los gigantes y me contó que nos va a ir
contando en su blog.
#hoyheaprendido que sí se
puede levantar de la mesa cuando alguien viene a visitar y que no te puedes
fiar cuando andas mientras piensas en otra cosa.
¡¡¡Muchas gracias Maite y Mikel por enseñarnos otro arte!!!
Hasta mañana amigos.