sábado, 9 de marzo de 2013

EXPOSICIÓN DE TOM CARR

El jueves por la tarde, nos fuimos mi madre, Jon, su madre Asun, Fermín, Mari Jose, Andrea, Alicia y su sobrina y yo al Centro Huarte a ver una exposición de Tom Carr llamada Turritopsis. Que pena que no pudo venir con nosotros Elena, :(. 

Esa palabra rara es el nombre de una pequeña medusa, que no se muere.


 Al llegar, Betisa nos atendió y nos guió la visita.

Después de las presentaciones, tuvimos que decir los tipos de materiales que sabíamos para hacer esculturas y nos entregó una piedra para que comprobemos que era de verdad y era dura para diseñar por ejemplo una estatua. Ella nos habló para saber qué entendemos por escultura (algo pesado, inmóvil, rígido, pegado al suelo o encima de un pedestal, etc).  Betisa nos explicó que las esculturas de Tom Carr no son así (ligeras, móviles, frágiles, sujetas con un hilo, unidas las piezas con un punto, buscando el equilibrio, etc).

A continuación, vimos esta escultura y me pareció que estaba hecha de papel porque se podía mover fácil. Betisa sopló y empezó a moverse y me daba la sensación de que subía y me recordaba a un sacacorchos girando.

 Luego, me acerqué con Andrea, a ver unas figuras que me dijeron que me iban a gustar Elena y ella. La verdad es que me gustaron las distintas formas que había y los cambios de color.

 En esta  espiral, no hice la prueba de la voz pero parece que si te metías más adentro, se escuchaba más grave o aguda la voz.


 Después pasamos a una sala muy grande donde había unas esculturas expuestas. La de la pared del fondo engañaba, porque desde lejos parecían líneas curvas blancas y al acercarnos vimos que tenían colores.

 Parecía que hacían círculos las diferentes rayas de colores y además, como si no terminase nunca.

 Aquí me pareció ver una V y bastante ligera y que si la movías, parecía que bailaba. Además, me sorprendió que había que usar un guante especial para no manchar la obra.


En esta, no pude ver si las tres piezas que formaban la obra, estaban juntas o no, porque parecían pegadas en un punto. Había que buscar el equilibrio para que no se caígan, como Betisa en la foto.


Luego, con un proyector vimos como gente subía y bajaba y de todo tipo y parecía un montón de sitios como las escaleras mecánicas de un aeropuerto, estación de autobús, etc Estaba guay porque se podía hacer como si tu estuvieras ahí.  Aquí nos contó la diferencia entre escultura e instalación. Porque en las instalaciones nos podemos meter y/o participar. Estuvimos pasando delante del proyector y se veían nuestras sombras junto a las figuras que entraban y salían.

En la sala de arriba, la exposición de Tom Carr y sus alumnos. 




  En la primera imagen, se ve una botella dentro ¿de qué?. Los sentidos nos engañan. 


Por la parte de atrás, vimos qué pasaba en realidad. Había dos botellas y una luz.


A continuación, pasamos a una sala oscura y se veía una luz que entraba por una puerta entreabierta. Nos decía Betisa ¿a qué os recuerda? a mí me parecía a la película de Moster House. En realidad eran unas luces hechas por dos proyectores y una manilla de una puerta puesta en la pared. Además, Alicia nos enseñó algo que yo no lo sabía y era que si giras la cabeza desde el proyector hacía la puerta imaginaria, que se ven más de un color.

Para terminar, hicimos un cuestionario entre todos y la que escribía era Alicia. Era bastante fácil porque se entendían todas las preguntas.


Me gustó mucho la exposición y os aconsejo que la veáis. 

 Muchas gracias a Betisa por explicar y ser tan simpática.